Congregadas en alguna de las 111 manifestaciones convocadas en todo el Estado español, decenas de miles de personas secundaron ayer, jueves 29 de marzo, la jornada de huelga general.
Durante todo el día en Valladolid, la riada de manifestantes inundó las calles más céntricas de la ciudad. Los asistentes mostraban su indignación por la reforma laboral y los recortes bajo lemas y cánticos como: “Tengo un contrato basura que es lo que se lleva ahora, tengo un contrato basura porque es la última moda”, “Queremos becas y no hipotecas” o “Luego diréis que somos cinco o seis”.
Para la Asamblea de Estudiantes de la Universidad de Valladolid, la jornada comenzaba a las ocho y media en la facultad de Filosofía y Letras donde, divididos en dos grupos, organizaban piquetes informativos en institutos y facultades.
A las doce en punto, la Plaza Mayor, estaba abarrotada de gente de diversos colectivos dispuesta a secundar la manifestación convocada a esa misma hora por La Asamblea de Estudiantes de la Uva, Alternativa Universitaria, CJC, LIZA, UJCE y YESCA y apoyada por los sindicatos mayoritarios.
Durante todo el día en Valladolid, la riada de manifestantes inundó las calles más céntricas de la ciudad. Los asistentes mostraban su indignación por la reforma laboral y los recortes bajo lemas y cánticos como: “Tengo un contrato basura que es lo que se lleva ahora, tengo un contrato basura porque es la última moda”, “Queremos becas y no hipotecas” o “Luego diréis que somos cinco o seis”.
Para la Asamblea de Estudiantes de la Universidad de Valladolid, la jornada comenzaba a las ocho y media en la facultad de Filosofía y Letras donde, divididos en dos grupos, organizaban piquetes informativos en institutos y facultades.
A las doce en punto, la Plaza Mayor, estaba abarrotada de gente de diversos colectivos dispuesta a secundar la manifestación convocada a esa misma hora por La Asamblea de Estudiantes de la Uva, Alternativa Universitaria, CJC, LIZA, UJCE y YESCA y apoyada por los sindicatos mayoritarios.
“Hemos venido porque estamos en contra de la privatización, la reforma laboral y la bajada de sueldos y porque los padres no pueden pagar” decía M.L., una estudiante de 4º de la ESO.
“Hoy la educación no está en las aulas, está en la calle” afirmaba S.R., un estudiante universitario.
Más de dos mil personas siguieron el recorrido de la manifestación por algunas de las calles del centro de la ciudad durante una hora y media.
Los asistentes, en su mayoría estudiantes, caminaban bajo lemas como: “Vergüenza me daría trabajar en este día”, “No hay pan para tanto chorizo” o “La educación no se vende, se defiende”.
Ante la pregunta de si sería necesario tomar otras medidas a parte de la Huelga General, D.G., ahora estudiante de un ciclo superior tras estar tres años en el paro, afirmaba: “Esto es solo pastoreo. Yo continuaría con las huelgas indefinidamente hasta que alguien reviente; o ellos o nosotros”.
M.G., una mujer parada de 50 años decía: “Yo estoy aquí para apoyar a los jóvenes y desde luego, tengo claro que esto no es suficiente pero tenemos que hacernos oír, que sepan lo que queremos y que no se crean los dueños”. También añadía: “Educación y sanidad deberían ser sagradas; además, es absurdo que los padres hagamos un esfuerzo en la formación de los jóvenes y luego se tengan que ir fuera de España a buscar trabajo” “Con el tiempo solo podrán estudiar los hijos de quienes tienen dinero” añadía otra mujer que pasaba al lado.
M.G. finalizaba diciendo: “Hay mucha gente que no ha hecho huelga porque tiene miedo de las repercusiones”.
“Hoy la educación no está en las aulas, está en la calle” afirmaba S.R., un estudiante universitario.
Más de dos mil personas siguieron el recorrido de la manifestación por algunas de las calles del centro de la ciudad durante una hora y media.
Los asistentes, en su mayoría estudiantes, caminaban bajo lemas como: “Vergüenza me daría trabajar en este día”, “No hay pan para tanto chorizo” o “La educación no se vende, se defiende”.
Ante la pregunta de si sería necesario tomar otras medidas a parte de la Huelga General, D.G., ahora estudiante de un ciclo superior tras estar tres años en el paro, afirmaba: “Esto es solo pastoreo. Yo continuaría con las huelgas indefinidamente hasta que alguien reviente; o ellos o nosotros”.
M.G., una mujer parada de 50 años decía: “Yo estoy aquí para apoyar a los jóvenes y desde luego, tengo claro que esto no es suficiente pero tenemos que hacernos oír, que sepan lo que queremos y que no se crean los dueños”. También añadía: “Educación y sanidad deberían ser sagradas; además, es absurdo que los padres hagamos un esfuerzo en la formación de los jóvenes y luego se tengan que ir fuera de España a buscar trabajo” “Con el tiempo solo podrán estudiar los hijos de quienes tienen dinero” añadía otra mujer que pasaba al lado.
M.G. finalizaba diciendo: “Hay mucha gente que no ha hecho huelga porque tiene miedo de las repercusiones”.
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| Lectura del comunicado en la Plaza Mayor al finalizar la manifestación. |
Más de 40.000 personas acudieron a la manifestación convocada a las 6 de la tarde en Plaza Colón por los sindicatos mayoritarios para protestar contra la reforma laboral y los recortes.
A la cola de los participantes se encontraban los componentes de la Asamblea de Estudiantes de la Uva, junto a otros colectivos como el movimiento a favor de la escuela pública o la CNT.
La manifestación duró más de dos horas y de nuevo, recorrió algunas de las calles céntricas de la ciudad de Valladolid.
Debido al gran número de asistentes, la cabecera de la manifestación formada por los sindicatos mayoritarios, se agolpaba en la plaza mayor mientras que los que estaban en la cola aún no habían salido de Plaza Colón.
Los gritos y consignas más escuchados durante todo el recorrido fueron: “No nos mires, únete”, “Esta reforma la vamos a ganar” y “Menos crucifijos y más sueldos fijos”.
La manifestación finalizó con un bloque crítico formado por CNT, CGT, Bloque Obrero y la Asamblea de Estudiantes en la Plaza de la Libertad (Portugalete) donde representantes de cada una de las organizaciones procedieron a la lectura de diversos comunicados que pusieron punto y final a la jornada.
A la cola de los participantes se encontraban los componentes de la Asamblea de Estudiantes de la Uva, junto a otros colectivos como el movimiento a favor de la escuela pública o la CNT.
La manifestación duró más de dos horas y de nuevo, recorrió algunas de las calles céntricas de la ciudad de Valladolid.
Debido al gran número de asistentes, la cabecera de la manifestación formada por los sindicatos mayoritarios, se agolpaba en la plaza mayor mientras que los que estaban en la cola aún no habían salido de Plaza Colón.
Los gritos y consignas más escuchados durante todo el recorrido fueron: “No nos mires, únete”, “Esta reforma la vamos a ganar” y “Menos crucifijos y más sueldos fijos”.
La manifestación finalizó con un bloque crítico formado por CNT, CGT, Bloque Obrero y la Asamblea de Estudiantes en la Plaza de la Libertad (Portugalete) donde representantes de cada una de las organizaciones procedieron a la lectura de diversos comunicados que pusieron punto y final a la jornada.
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